Cortinas de seguridad, una necesidad imperativa para las plantas

La facilidad de instalación es una característica destacable de las cortinas de luz de Keyence, pues deriva en ahorros de tiempos, además de certidumbre, al reducir el riesgo de que la conexión se realice de manera errónea.

Las cortinas de luz de seguridad de Keyence constituyen una herramienta fundamental en el sector industrial, para el cual resguardar la integridad de los operadores es una de las áreas prioritarias en las que no se debe escatimar.

Para Continental Corporation, una empresa líder en la manufactura de componentes electrónicos para automóviles, estos dispositivos de seguridad siempre han estado presentes en gran parte de las estaciones de sus plantas, sobre todo en aquellas donde los movimientos de cilindros pueden llegar a afectar al operador. La premisa de su implementación es simple: prevenir cualquier incidente.

“Existen operaciones que son meramente manuales, donde no existe riesgo para nuestro recurso humano; en ellas no es necesaria la implementación de cortinas de seguridad. De ahí en fuera siempre las hay, para impedir el acceso del operador a una zona determinada. Entre 90 y 95 por ciento de estas estaciones (máquinas que impliquen algún riesgo de impacto hacia el operador) tienen cortinas de seguridad”, detalla Continental.

Los especialistas de esta compañía revelan que los riesgos asociados a la carencia de estas cortinas van desde un impacto leve hasta acciones incapacitantes como la pérdida de miembros, que puede suceder al impactarse con los cilindros neumáticos que se manejan internamente en la máquina, también protegen de accidentes en estaciones donde hay prensado de piezas o procesos de soldadura.

“Su uso se aprecia por ejemplo en la parte frontal de la estación, donde el operador carga el material que se procesa en dicha máquina. Sirve para impedir que el sistema genere ciertas alarmas; o para prevenir que se detenga un ciclo en caso de obstrucción una vez cargado el material. La máquina detecta que los componentes están adecuadamente colocados y que las cortinas no están obstruidas”.

Estandarización que rebasa fronteras
Tras comprobar la e ciencia de las cortinas de seguridad de Keyence, Continental se reunió con personal de mantenimiento de procesos de maquinaria de la marca en China, a n de asegurarse de que no existirían proble- mas ulteriores de refaccionamiento. “Ellos se dieron a la tarea de buscar la mejor opción para sus necesidades, y así se llegó a la de nición de los modelos ideales: la serie GL-R”.

Esta línea se caracteriza por su robustez, que además de proteger al recurso humano, protege a la propia cortina ante posibles caídas de herramientas o piezas sobre el lente de la estructura, gracias a su carcasa a prueba de impactos. La serie GL-R de Keyence es considerada también como ‘inteligente’, pues no cuenta con zonas muertas muertas, por lo cual se aprovecha al 100% la cortina y se reduce el costo utilizando cortinas de menor longitud. Otra característica sobresaliente de la cortina es que se puede montar al ras dentro de los equipos, eliminando la necesidad de protección adicional o fuera del montaje.

Los resultados favorables entregados por estas cortinas de seguridad han llevado a Continental a incrementar sus negocios con el país asiático y a trabajar de la mano con ellos para asegurar que se cuenta siempre con las mejores máquinas posibles. “Para estos nes nos reunimos, averiguamos sus necesidades, los componentes que requieren, y analizamos cuáles son sencillos de conseguir con sus proveedores o que incluso ya los tengan como refacción”.

Así inició un proceso de estandarización, que tras pro- bar las diferentes alternativas que brinda Keyence, se optó por las GL-R, que son compactas y prácticas. Para Continental, algo que ayuda de manera signi cativa es la conexión entre las cortinas y los relevadores de seguridad; “el hecho de que sea un solo cable, que ya viene con su conector y solamente se tiene que enroscar facilita mucho el proceso de instalación en comparación con otras marcas. La experiencia que hemos tenido es que al tener un cable con multihilos, se tiene que conectar cada hilo hacia cierto punto del relevador, y así sucesivamente, algo que toma mucho tiempo”.

Adicional al ahorro sustantivo de tiempo, esta característica de la serie GL-R de Keyence otorga certidumbre, pues elimina la posibilidad de realizar la conexión de manera inadecuada. “Una vez que se conecta la cortina, ya no se vuelve a mover. Se la damos al cliente, y a menos que éste requiera trasladar toda la máquina, no vuelve a moverse hasta que la estación deja de ser funcional. Hasta el momento, nunca hemos recibido retroalimentación sobre fallas en estas cortinas”, explican especialistas de Continental.

Es así que Continental hoy vela por la seguridad con estos equipos a lo largo de diferentes plantas, tanto en México como en el extranjero; “la estandarización, aparte de facilitarnos la realización de tareas rutinarias, y hacerlas más sencillas, ayuda también en materia de costos, porque genera la certidumbre de que el material que se va a utilizar es el adecuado, y al manejar volúmenes importantes, podemos llegar a negociaciones con los provee- dores sobre costos preferenciales”.

Tal experiencia ha llevado a Continental un paso más allá, al introducir también de manera estandarizada los sensores LR-Z. “Hemos visto que en China compran ya refacciones de la marca. Para nosotros, tener un proveedor único que nos surta varios componentes que utilizamos en la máquina es lo mejor, porque evita realizar múltiples reportes y entregar múltiples estatus; y es más fácil y práctico el contacto con los técnicos cuando asisten a la planta a ayudarnos a hacer pruebas, por mencionar unos ejemplos; es más sencillo que todo esto se uni que”, concluyen.

  Solicite más información…